Una mujer visionaria que decidió iniciar su propia empresa cuando la compañía en la que trabajaba se negó a darle un asenso por el mero hecho de ser mujer y fue con $5,000 dólares que fundo Mary Kay Cosmetics, ventas por catálogo y principal competidor de Avon Cosmetics. En la actualidad, su brillante idea cumple 100 años desde su fundación. Según se sabe, el propósito principal era crear “una compañía que le brindaría a la mujer el potencial ilimitado para alcanzar el éxito personal y económico” que necesita, dejándola ser dueña de su tiempo y empoderar a las mujeres, ya que ella buscaba que las mujeres también pudieran lograr todos sus sueños en un mundo dominado por hombres.